CDMX, 23 de agosto 2024- Los principales socios comerciales de México, los gobiernos de Canadá y Estados Unidos se manifestaron ayer en contra de la Reforma al Poder Judicial, impulsada por el presidente López Obrador, derivado de la incertidumbre en la representatividad que tendrán los nuevos jueces elegidos por voto.
El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, manifestó ayer que la política feroz que se desatará en México si se llegaran a aprobar las elecciones de jueces en 2025 y 2027, «amenaza la histórica relación comercial que hemos construido” En conferencia de prensa agregó que debe garantizarse que en el Poder Judicial haya jueces capaces de gestionar litigios complejos.
Por su parte, el embajador de Canadá, Graeme Clark, aseguró que los inversionistas de su país están preocupados por esta reforma que se discutirá en el Congreso en septiembre, porque lo que quieren es estabilidad y la nueva reforma no la proporciona, ya que será un riesgo hacer más inversiones en México.
Ken Salazar dijo que según su experiencia «apoyando el Estado de Derecho, creo que la elección directa de jueces representa un riesgo mayor para el funcionamiento de la democracia de México. Cualquier reforma judicial debe tener las salvaguardas que garanticen que el Poder Judicial sea fortalecido y no esté sujeto a la corrupción de la política».
Cabe contextualizar que la Reforma al Poder Judicial prevé el desmantelamiento de la carrera judicial, por lo que cualquier persona incluso con título «patito» de abogado, podría llegar a ser electo por voto popular si es aprobado por el presidente o presidenta; además busca convertir al Poder Judicial a modo del Ejecutivo, por lo que ya no será un contrapeso en los tres Poderes de la Unión, porque prácticamente el Poder Legislativo ha perdido su fuerza al prevalecer legisladores que no le cambian una coma a las iniciativas de reforma del mandatario.
Los primeros en manifestarse en contra de la Reforma del Poder Judicial fueron los trabajadores del Poder Judicial, mediante un paro de labores que lleva tres días pues la mayoría de los jueces y ministros en el país no consideran que eso mejore el sistema de justicia en el país; de igual forma empresarios y cámaras de comercio nacionales tampoco apoyan la reforma y ahora los principales socios comerciales de México advierten lo nocivo que puede ser para que ellos permanezcan con sus inversiones en este país.
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