CIUDAD DE MÉXICO.— Entre la falta de productividad y mantenimiento así como por el huachicoleo, que no es más que el robo de combustible a la paraestatal que conoce la 4T, Petróleos Mexicanos (Pemex) reportó este viernes una pérdida neta de 255 mil 937 millones de pesos en el segundo trimestre del año, que contrasta con la ganancia de 25 mil millones alcanzada en el mismo periodo de 2023.
Los resultados de la petrolera fueron entregados este viernes a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), conforme estaba previsto. Es el último reporte que Octavio Romero Oropeza presenta en el sexenio actual, como director general de Pemex.
#empresas l #Pemex generó pérdidas por 255,937 mdp en el segundo trimestre
Sus ingresos cayeron 1.1% por menores ventas y por los efectos del tipo de cambio. https://t.co/mVpR8tvXvy pic.twitter.com/dAqlkfOgp8
— Fortuna y Poder (@FortunayPoder) July 26, 2024
Los ingresos totales de Pemex llegaron a 410 mil millones de pesos contra los 414 mil millones de hace un año. Por el contrario, los costos de operación de la empresa crecieron 11 por ciento en el lapso de abril a junio de 2024, lo que propició una reducción en su utilidad.
Los resultados también se vieron afectados por un mayor costo financiero y una pérdida cambiaría de 159 mil 684 millones de pesos. En tanto, la deuda de ubicó en 99 mil 391 millones de pesos al cierre de junio de 2024, cuando al cierre de marzo pasado se ubicó en 101 mil 499 millones de dólares.
Pemex señaló que en abril-junio, el total de impuestos y derechos ascendió a 58 mil millones de pesos, una disminución de 15.3 por ciento frente a igual lapso del 2023, debido principalmente a la disminución en la tasa del Derecho por la Utilidad Compartida (DUC), el más significativo que paga la empresa en términos de monto, que pasó de 40 por ciento en 2023 a 30 por ciento en 2024.
Los desvíos a la refinería Dos Bocas también han contribuido al desplome de PEMEX que debe cargar con la costosa obra que no funciona para refinar ni un solo barril de petróleo; así como por el huachicoleo, es decir del robo de combustibles, del que se beneficia la red de traficantes conocida por el gobierno de la 4T, a la que supuestamente combatió, pero al parecer solo cambió de dueño y siguen saqueando a la paraestatal. El economista Mario Di Constanzo informó que con AMLO ahora hay más tomas clandestinas de huachicol.
“Los ingresos del crimen organizado por actividades diferentes al tráfico de drogas, en delitos como extorsión, robo al autotransporte, huachicol, tráfico de migrantes ilegales y lavado de narco remesas, superan los 320 mil millones de pesos anuales”, un gran negocio para quienes se benefician de esos fondos.