Ciudad de México.- La Secretaría de Salud (SEDESA) de la Ciudad de México emitió un comunicado ante las altas temperaturas, informando que hasta el momento no se han reportado casos de personas ingresadas a hospitales por golpe de calor en la capital. Sin embargo, se hace un llamado especial a las personas mayores de 60 años para que eviten exponerse directamente al sol y se mantengan hidratadas durante todo el día.
El director de la Clínica de Geriatría Iztacalco, doctor Rodrigo Morales, explicó que con la edad disminuye la sensación de sed y el consumo de alimentos, lo que puede provocar deshidratación. Por ello, recomendó ingerir bebidas rehidratantes como suero oral y suministrar líquidos a aquellos que no puedan o no recuerden beber.
Las personas mayores de 60 años son más susceptibles a presentar deshidratación y golpe de calor debido a la exposición prolongada a altas temperaturas ambientales. Por ello, SEDESA y la Clínica de Geriatría Iztacalco brindan las siguientes recomendaciones para prevenir estos problemas:
- Evitar realizar ejercicio o actividad intensa al aire libre entre las 11:00 a 16:00 horas
Permanecer en casa cuando la temperatura es más elevada y preferir salir por la tarde
No exponerse demasiado al sol y aplicarse protector solar
Beber abundantes líquidos, aunque no tenga sed, por lo menos dos litros de agua diarios
Vestir ropa ligera, clara y de algodón que permitan la transpiración
Consumir comida fresca, de preferencia alimentos vegetales naturales crudos como ensaladas, frutas y verduras
En caso de presentar síntomas sospechosos de deshidratación o golpe de calor, se recomienda bañar a la persona con agua fría, colocarla en un lugar fresco, administrar líquidos rehidratantes como suero oral y acudir a la unidad de salud más cercana si los síntomas son severos.
Los síntomas y signos que pueden indicar un golpe de calor incluyen piel caliente y seca pero no sudorosa, confusión mental, vómitos frecuentes y dificultad para respirar. En caso de deshidratación, los síntomas más frecuentes son dolor de cabeza, náuseas, fatiga y calambres musculares, entre otros.