La evaluación muestra que México presentó un descenso menor en matemáticas y lectura
El gobierno de Cuarta de AMLO prefiere bajo perfil educativo entre la población
CIUDAD DE MÉXICO.- Con relación a los resultados del Programa para la Evaluación Internacional de Estudiantes (PISA), publicados por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en los que México queda en la posición 51 de 81 países valorados, por su bajo nivel educativo.
Aunque sin resultados visibles, la Secretaría de Educación Pública (SEP) informó por medio de un comunicado que: el gobierno de la Cuarta Transformación trabaja por el fortalecimiento de la escuela pública, para brindar una formación con enfoque humanista, científico, con equidad e inclusión que favorezca el bienestar de niñas, niños, adolescentes y jóvenes.
La evaluación aplicada en los meses de abril y mayo de 2022 es una prueba estandarizada que tiene como propósito medir a través de preguntas, la formación de estudiantes de 15 años.
Las pruebas internacionales estandarizadas no consideran las condiciones reales en las que se desarrolla el trabajo docente, así como los procesos situados de la enseñanza y los aprendizajes en las aulas de los distintos países.
La más reciente aplicación de esta evaluación en nuestro país ocurrió en el contexto mundial de la etapa final de la emergencia sanitaria por COVID-19; todos los países enfrentaron de manera diferenciada esta terrible circunstancia.
En el ámbito educativo, el Gobierno de México diseñó estrategias de atención para privilegiar la seguridad y el interés superior de las y los estudiantes, y una vez que se superó la contingencia se realizaron esfuerzos para asegurar el regreso a las aulas de niñas, niños, adolescentes y jóvenes, y lo conseguimos: se recuperó el 100 por ciento de la matricula.
Los resultados que da a conocer PISA no demuestran cambios significativos respecto a las ediciones anteriores de esta evaluación. Nuestros estudiantes presentan retos en las tres áreas evaluadas: matemáticas, español y ciencias, lo que confirma que era necesario un cambio en el modelo educativo, situación que se agravó por la emergencia sanitaria.
La evaluación muestra que México presentó un descenso menor en matemáticas y lectura que el promedio de los países que integran la OCDE. La prueba reflejó que si a un joven de educación básica se le da un texto de una cuartilla para leer y se le pregunta de qué se trata, simplemente no sabe. Tampoco puede realizar operaciones básicas de suma, resta, multiplicación y división.
Según el gobierno de la 4T, México emprendió un profundo proceso de transformación en su sistema educativo, con la implementación del Plan de Estudio 2022 y la Nueva Escuela Mexicana, que en teoría -según la SEP- implica un cambio hacia enfoques pedagógicos innovadores, interdisciplinarios, como el aprendizaje por proyectos, incorporando todas las áreas del conocimiento, incluyendo el desarrollo de habilidades socioemocionales.