Morelia, Michoacán.- Los santuarios de la Mariposa Monarca de El Rosario, Sierra Chincua y Senguio, se encuentran listos para recibir a mediados del mes de noviembre al lepidóptero migratorio, así como a 511 mil turistas y visitantes, quienes se espera dejarán una derrama económica superior a los 625 millones de pesos.
El avistamiento de la Mariposa Monarca es una de las maravillas del planeta, recorre la costa de América desde Canadá y Estados Unidos hacia los bosques tropicales de México, en específico en zonas del Estado de México, Michoacán y en los últimos tiempos se han visto en Chiapas, donde buscan el calor y la humead de estas áreas en las que hibernan para continuar su ciclo migratorio de subsistencia.
El secretario de Turismo del estado, Roberto Monroy García, destacó que estas cifras representan un incremento del 5 y 7 por ciento, respectivamente, en comparación con la temporada anterior, y que será de noviembre de 2023 a marzo de 2024 cuando las familias podrán disfrutar de esta experiencia única en el mundo.
Dio a conocer que actualmente se realizan trabajos para brindar mejores condiciones a los visitantes, como la remodelación de la sala audiovisual de la Mariposa Monarca, ubicada en el Ejido del Rosario, donde se invierten 221 mil 966 pesos; y la instalación de la señalética turística oficial del País de la Monarca, para que los visitantes cuenten con las facilidades para llegar a los diferentes santuarios.
Además se trabaja en un convenio con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), para contar con energía eléctrica en el santuario de Sierra Chincua, lo que permitirá ampliar el horario para los visitantes, y la posibilidad de contar con acceso a internet, así como un programa de formación de guías especializados en turismo orientado a la naturaleza, con actividad especifica en interpretación de mariposas y aves.
Como cada año se contará con una oferta y accesibilidad, hospedaje en la región y la posibilidad de acceder a los santuarios tanto a pie como a caballo, gastronomía y artesanía local.
Ilustración: Bárbara Heredia
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