CIUDAD DEL VATICANO.- A veces, los mayores herejes son también los creyentes más sinceros. En el mundo del cine sobran los ejemplos de esto, de Robert Bresson a Carl Theodor Dreyer… o ese Martin Scorsese que, tras haber sembrado el escándalo en 1988 entre el integrismo católico con La última tentación de Cristo, acaba de salir de un encuentro con el papa Francisco I llevando un importante encargo entre manos.
El pasado sábado, mientras asistían a un simposio de artistas católicos en el Vaticano, Scorsese y su esposa Helen Morris fueron recibidos en audiencia por el pontífice. Aunque el encuentro fue breve, según Variety, el director anunció acto seguido que de él podría derivarse su segundo filme sobre la vida de Jesús.
“He respondido a la llamada del papa a los artistas de la única forma que sé: imaginando y escribiendo un guion sobre la vida de Jesús”, afirmó el autor de Taxi Driver. “Y estoy a punto de empezar a llevarlo a cabo”, añadió durante el encuentro, organizado por la Universidad de Georgetown y la revista La civiltà cattolica. Antonio Spadaro, director de la publicación, afirmó que Scorsese se sintió “muy conmovido por la llamada del papa: ‘Haced que veamos a Jesús”.
Scorsese habló de su admiración por El evangelio según san Mateo, de Pier Paolo Pasolini, de la polémica que rodeó a La última tentación de Cristo y de otras películas religiosas de su filmografía. Entre ellas, Silencio, un filme sobre los misioneros jesuitas (orden a la que pertenece Francisco I) que sufrieron martirio en Japón.
Por lo pronto, el director tiene pendiente de estreno Killings of the Flower Moon, su mastodóntico filme con Leonardo DiCaprio y Robert De Niro que recibió encendidos aplausos en Cannes y llegará a las salas el 20 de octubre. Tras esas declaraciones en la que Scorsese afirmaba sentirse anciano y sin fuerzas para seguir rodando, seguro que a sus admiradores les alegra verle de nuevo en la brecha.
AM.MX/fm
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