Por Bárbara Heredia

CDMX.- Miles de personas participaron en la marcha «Mi voto no se toca»,  en protesta por las modificaciones de ley que afectarán la estructura y los fondos con los que opera el Instituto Nacional Electoral (INE)  para la organización de las elecciones en el país, la emisión de las credenciales de elector y la salvaguarda del patrón electoral.

Los manifestantes ocuparon de manera pacífica las calles del primer cuadro de la capital y desde un templete del Zócalo los oradores se manifestaron en torno a las intenciones con el Plan B del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.

Los ciudadanos marcharon desde Reforma hacia el Zócalo, llevaban camisas rosas y blancas por la paz; ante las las multitudes se cerró la circulación vial en avenidas como Eje Central, Cinco de Mayo y 20 de Noviembre. De antemano el Gobierno de la Ciudad de México anunció que cerraría las estaciones del Metro Zócalo, Hidalgo y Pino Suárez y se pusieron a reforzar toda la muralla de tablones de madera que colocaron alrededor de Palacio Nacional, desde donde despacha AMLO.

Los ciudadanos llevaban pancartas en defensa de la autoridad electoral y con mensajes críticos al presidente López Obrador, quien propuso el llamado Plan B, como segunda parte de las Reformas Electorales que no le fructificaron. Otras pancartas también hacían alusión a la ministra Yasmín Esquivel, quien enfrenta dos acusaciones por plagiar sus tesis para obtener el grado de licenciatura y de doctorado; sin embargo no se vio ninguna persona que defendiera a Calderón, a García Luna o al fentanilo, como lo estuvo difundiendo la dirigencia de Morena.

Entre los asistentes a la marcha estuvieron ciudadanos que conforman la agrupación Unidos para Mejorar, que denunciaron que las reformas electorales recién aprobadas, también llamadas Plan B, afectan y contradicen lo que establece la Constitución.

Sabemos que los ciudadanos no estamos facultados para presentar acciones de inconstitucionalidad, pero sí podemos dar nuestra opinión de manera voluntaria y por escrito, para que sea tomada en cuenta por los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación al momento de resolver si esas leyes son constitucionales o inconstitucionales.

Por tanto, además de participar en la marcha, hicieron una petición a través de Change.org para solicitar a la gente su firma, con el fin de hacerles llegar un mensaje a los ministros de la SCJN, la última instancia para la defensa de reformas inconstitucionales.

¿Qué le queremos decir a la SCJN?

1.     Se cambiaron las reglas de los procesos electorales por el grupo que ostenta el poder, sin escuchar a la ciudadanía, a las organizaciones de la sociedad civil, a los pueblos y comunidades indígenas, a los grupos vulnerables, a los órganos técnicos, a los trabajadores de los órganos técnicos, y sin escuchar a los partidos de oposición que son los otros contendientes de los procesos.

2.     El Plan B viola el derecho de la ciudadanía a la renovación de los poderes por medio de elecciones libres, auténticas y confiables, pues cambia la estructura operativa del INE, reduciéndola en un 85%, lo cual afecta directamente la eficacia del Instituto para integrar e instalar más de 160 mil casillas y realizar el conteo de las votaciones de manera certera y oportuna.

Se restringe la capacidad sancionatoria y regulatoria de las autoridades electorales, lo cual hace que no existan condiciones de equidad en la contienda electoral.

4.     Se debilita la autonomía del INE. Ya no podrá ejercer sus facultades en beneficio de la protección de los derechos político- electorales de la ciudadanía. Ahora tendrá que depender de la Cámara de Diputados para el tema presupuestario; de la Secretaría de Relaciones Exteriores, para la construcción del padrón electoral; y de las autoridades federales, estatales y municipales para la ubicación de sus módulos de atención.

5.     Se cambia el modelo de comunicación política permitiendo que los actores gubernamentales hagan uso de los recursos públicos en su beneficio, generando condiciones desiguales en la participación electoral.

6.     Se generan condiciones que violan directamente los derechos a la identidad, a la información, a la protección de datos personales de la ciudadanía.

7.     Se pone en riesgo el ejercicio del voto universal, libre, directo y secreto de las mexicanas y los mexicanos.

8.     Se modifica el sistema de medios de defensa en materia electoral, afectando directamente el derecho a la tutela judicial efectiva de la ciudadanía.

Sí estás de acuerdo que le comuniquemos a la SCJN lo anterior, firma aquí.