Rajak B. Kadjieff / Moscú
*Análisis geopolítico del historiador Mark Galeotti.
*La Operación Militar Especial de Moscú a un año de distancia.
*Ideas “erróneas” llevaron a Vladimir Putin a lanzarse a la guerra.
*Los cuatro conflictos bélicos emprendidos por el nuevo zar ruso.
*“En todos ha creído que podía ganar fácilmente”.
El historiador británico Mark Galeotti, autor de “Las guerras de Putin: de Chechenia a Ucrania”, habla sobre los falsos supuestos y expectativas que precedieron la invasión rusa de Ucrania del 23 de febrero de 2022, el estado de ambos ejércitos y lo que podría ocurrir en 2023.
Galeotti dice que, ajeno y lejano a lo que ocurre en otras latitudes, Vladímir Putin recibió sentado en en extremo de una larguísima mesa al presidente de Francia, Emmanuel Macron y a Olaf Scholz, canciller alemán, quienes se encontraban en el otro lado del mueble, una semana antes de la Operación Militar Especial ordenada desde el Kremlin.
Putin quiso, desde entonces, mostrar y guardar distancia de Occidente, como lo hace notar Galeotti, historiador reconocido y profesor honorario del University College de Londres.
-Vladimir Putin ha llevado a Rusia a cuatro guerras: Chechenia, Georgia, Siria y, por último, Ucrania. ¿Por qué Occidente se ha sorprendido tanto con la invasión rusa de 2022?
“Por sus dimensiones. Desde finales de 1999 hasta ahora, solamente ha habido tres años bajo el gobierno de Putin en los que Rusia no se haya visto envuelta en una u otra guerra. Y, sin embargo, siempre fueron conflictos limitados.
“En todas las ocasiones, Putin había elegido objetivos que creía que podría ganar fácilmente. Y el malentendido fundamental en Occidente fue no reconocer que él estaba convencido de que derrotaría a Ucrania más fácilmente, lo que luego resultó ser un catastrófico error de cálculo”.
-A numerosos analistas y expertos les sorprendió la invasión. ¿Cree usted que tuvo algo que ver con el aislamiento de Putin durante la pandemia de COVID-19? ¿Su burbuja de información se ha vuelto demasiado peligrosa o demasiado pequeña?
“Hasta la reunión televisada del Consejo de Seguridad la semana anterior a la invasión, se calculaba la probabilidad en sólo un 30 % o 40 %, precisamente porque el ataque no parecía tener sentido. Hasta ese momento, Putin era en muchos sentidos el claro vencedor.
“Había acumulado una enorme fuerza en las fronteras ucranianas, y esta presencia estaba infligiendo graves daños a la economía ucraniana sin cruzar las fronteras. Entonces, el presidente de Francia y el canciller alemán, entre otros líderes de Occidente, lo visitaron en Moscú para pedirle no invadir a Ucrania”.
Galeotti asegura lo grande que fue el malentendido: “Y hasta qué punto Putin estaba convencido de que Ucrania no era un país real, que los ucranianos no ofrecerían ninguna o poca resistencia y que el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, era supuestamente un drogadicto que huiría o sería capturado”.
Para el catedrático inglés, todos esos falsos supuestos llevaron a Rusia a esta guerra. Y revelan un mundo propio creado por él mismo, en el que no permite que le digan la verdad. Sus oficiales de inteligencia y su entorno solo le decían lo que quiere oír”.
-¿Entonces cree que los servicios de inteligencia informaron mal a Putin?
“Un antiguo oficial ruso de inteligencia me dijo una vez: ´Nosotros aprendimos que al zar no se le dan noticias inoportunas´. En otras palabras, es políticamente peligroso decirle a Putin cosas que no quiere oír. Un círculo cerrado protege al presidente de las verdades incómodas”.
-¿Ha fracasado Rusia para conseguir o alcanzar sus objetivos bélicos?
“¡Claro que sí!, y la única pregunta ahora es cómo será la derrota. Putin aún espera poder agotar la resistencia de Ucrania y Occidente dando a entender que esta guerra continuará durante mucho tiempo. Y que, si es necesario, puede seguir enviando soldados rusos al conflicto”.
Según Mark Galeotti, Putin está desafiando a Occidente, diciéndole que siga enviando miles de millones de dólares, euros y libras a Ucrania para mantener esta guerra.
“Podemos continuarla -dice- todo el tiempo que quiera. Esa es su última esperanza de conseguir algo que pueda vender políticamente como una victoria”.
La cuestión -añade el internacionalista- es que los rusos no han logrado tomar Kiev. No han conseguido extender realmente su control sobre las regiones de Donetsk y Lugansk. Tienen el corredor de Crimea, pero ahora está amenazado. Y, por supuesto, ya han tenido que retirarse de Jersón.
En opinión del entrevistado, mientras Ucrania construye cada vez más un moderno ejército, el ruso se debilita: ”Rusia es un país grande, tiene un enorme complejo militar industrial y puede continuar esta guerra durante mucho tiempo; pero no podrá hacer retroceder por mucho tiempo a los ucranianos con sus feroces ofensivas”.
¿Cuáles son sus previsiones para 2023? ¿Podrá acabar esta guerra el año que viene? Y si es así, ¿cómo?
“Podría ser. Dependerá de que los ucranianos sean capaces de lograr avances significativos en el campo de batalla. Por el momento no existe una base real para las negociaciones. Ucrania quiere negociar desde una posición de fuerza.
Putin espera desesperadamente alargar la guerra. Espera contar en primavera con unos 150.000 reservistas adicionales entrenados en Rusia y Bielorrusia, y con ellos reforzar su frente en Ucrania.
The post “No existe base real para negociaciones en Ucrania” appeared first on Almomento | Noticias, información nacional e internacional.
febrero 21, 2023
133 Vistas
“No existe base real para negociaciones en Ucrania”
Por Vocero
Rajak B. Kadjieff / Moscú *Análisis geopolítico del historiador Mark Galeotti. *La Operación Militar Especial de Moscú a un año de distancia. *Ideas “erróneas” llevaron a Vladimir Putin a lanzarse a la guerra. *Los cuatro conflictos bélicos emprendidos por el nuevo zar ruso. *“En todos ha creído que podía ganar fácilmente”. El historiador británico Mark... Más [+]...