La secretaria de Educación Pública, Leticia Ramírez, por lo menos, debe saber cuales escuelas tienen deterioro en su infraestructura
CDMX.- Poco más de 51 por ciento de las escuelas a nivel nacional tiene 30 años o más de antigüedad, por lo que el estado de la infraestructura física y equipamiento presenta un grave rezago que se agudiza ante la falta de mantenimiento, situación que pone en riesgo la seguridad de alumnos, maestros y personal educativo, señaló la senadora Guadalupe Saldaña Cisneros, de Acción Nacional.
Advirtió que la pandemia provocada por el virus Sars-CoV-2 influyó de manera significativa para que muchas escuelas fueran vandalizadas, las cuales no están en condiciones adecuadas para recibir a niñas, niños y adolescentes.
“Esta situación la tenemos presente desde antes de la pandemia; sin embargo, ese deterioro se incrementó a raíz de la contingencia sanitaria”, agregó.
Por tal motivo, la legisladora pidió que la titular de la Secretaría de Educación Pública remita al Senado un informe de las escuelas públicas que presenten afectaciones o deterioro en su infraestructura, falta de mantenimiento y daño estructural.
En el punto de acuerdo que presentó, la legisladora solicitó que el reporte detalle las medidas que esa dependencia ha dispuesto para garantizar la seguridad de las y los alumnos que asisten a recibir clases, y de las personas que laboran en esas instalaciones.
Guadalupe Saldaña señaló que aún y cuando ya inició el regreso a clases presenciales en el país, muchas de las instalaciones de las escuelas públicas se encuentran deterioradas, al grado de imposibilitar que las y los alumnos cuenten con un lugar digno en el cual recibir sus clases, “sobre todo si hablamos de zonas rurales”.
La infraestructura física educativa y el equipamiento escolar son dos factores fundamentales para el quehacer educativo, ambos requieren de una constante inversión de recursos públicos destinados al mejoramiento de las condiciones físicas de las escuelas y el acceso a servicios básicos, aseveró.
Es fundamental conocer el estado que guardan sus estructuras, instalaciones hidrosanitarias, eléctricas, impermeabilizaciones, pues si los alumnos van a aulas en óptimas condiciones, equipadas, limpias, eficientes, con servicios de agua y electricidad, esto genera en ellos la motivación para estudiar y obtener un rendimiento máximo.
El punto de acuerdo fue remitido a la Comisión de Educación para su análisis y dictamen correspondiente.
VCR