En entrevista, el presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado explicó que era indispensable otorgar un plazo mayor a las Fuerzas Armadas para que sigan con las tareas de seguridad pública, sin embargo esa participación será regularizada gracias al quinto transitorio.
Destacó que los puntos relevantes de las modificaciones son que el Congreso se convierten en órganos de vigilancia, de rendición de cuentas, de control parlamentario sobre las fuerzas armadas que antes no había
El Pleno del Senado de la República aprobó la noche del 4 de octubre, con cambios, la reforma al Artículo Quinto Transitorio del Decreto en materia de Guardia Nacional, publicado en el Diario Oficial de la Federación el 26 de marzo de 2019, para extender, hasta 2028, la permanencia de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública.
Con 87 votos a favor y 40 en contra, las y los senadores modificaron la minuta que envió la Cámara de Diputados, a través de una adenda que se incorporó al inicio del debate para incluir mecanismos de control parlamentario, rendición de cuentas, evaluación y supervisión de las tareas de seguridad pública que realicen las Fuerzas Armadas.
Este dictamen mantiene la propuesta de la colegisladora para que “durante los nueve años siguientes a la entrada en vigor del presente Decreto, en tanto la Guardia Nacional desarrolla su estructura, capacidades e implantación territorial, el Presidente de la República podrá disponer de la Fuerza Armada permanente en tareas de seguridad pública”.
En la discusión en lo particular, también se incorporó una propuesta del senador Ricardo Monreal Ávila, para modificar el artículo segundo transitorio del dictamen, a fin de precisar que, a partir de la entrada en vigor del Decreto, el Consejo Nacional de Seguridad Pública determinará el grado de avance en el diagnóstico y los programas en materia de Guardia Nacional, en lugar del Secretariado Ejecutivo del Consejo Nacional de Seguridad Nacional.