Por Bárbara Heredia
GUADALAJARA, Jalisco.- Representantes del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en México presentaron los resultados de la primera etapa de implementación del proyecto “Fortalecimiento de la seguridad hídrica y resiliencia en cuencas prioritarias a partir de Soluciones basadas en la Naturaleza, conocido como Resiliencia hídrica, implementado por el organismo internacional, con el apoyo financiero de Fundación Coca Cola y Arca Continental.
Para asegurar la gestión sostenible del agua, el programa incorpora criterios de resiliencia y seguridad hídrica implementados por la misma comunidad, en coordinación de especialistas de PNUD, CocaCola y Arca Continental. Del total de precipitación pluvial, alrededor del 73 % se evapora, mientras que el 22 % escurre a través de ríos y arroyos y solamente el 6 % se filtra a través del subsuelo; por lo que el programa está enfocado a aprovechar al máximo este recurso.
El proyecto traerá beneficios de manera indirecta, en el mediano y largo plazo, a más de 8,115 personas del municipio Chapala, Jalisco, así como a todos y todas las usuarios y habitantes de las cuencas hidrográficas, aproximadamente 10 millones de habitantes, además de beneficiar a los ecosistemas de estas localidades.
México alcanzó en 2016 la tasa máxima de deforestación de 350,298 hectáreas , situación que influye directamente en la captación del vital líquido en las zonas donde transita con mayor regularidad, por lo que llevar a cabo trabajos en esta materia forman parte fundamental para el mejoramiento de la captación hídrica del país.
El objetivo de la iniciativa Resiliencia hídrica es contribuir a la seguridad hídrica de las cuencas Santiago y Zula, en Jalisco, a través de acciones de conservación, restauración y manejo sostenible de los ecosistemas de la región. A través de estos enfoques basados en los ecosistemas, se contribuye a mantener y mejorar la capacidad de los ecosistemas para captar y filtrar agua; proveer de hábitat a especies clave para la producción de alimentos; así como mejorar el control de la erosión de los suelos para evitar deslizamientos. Además, los ecosistemas sanos y resilientes generan desarrollo económico de las comunidades, entre otros beneficios.
A través del trabajo realizado en 93 hectáreas en la localidad de Santa Cruz de la Soledad, se contribuye a regular el ciclo del agua y también a combatir el cambio climático. Tan solo de la lluvia que cae en la región, alrededor del 73 % se evapora, mientras que el 22 % escurre a través de ríos y arroyos, mientras que solamente el 6 % se filtra a través del subsuelo. Es por ello que la implementación de iniciativas como ésta contribuyen a que la población cuente con agua en calidad y cantidad suficiente por lo que impulsar iniciativas en las que participen sectores públicos, privado y comunidad toman importancia.
Además de favorecer el acceso al agua y la resiliencia de cuencas y ecosistemas, PNUD, Fundación Coca-Cola y Arca Continental han contribuido al empoderamiento de las personas de la localidad. A través del proyecto se capacitó a un grupo de mujeres en materia de agua, servicios ecosistémicos, cambio climático y resiliencia, manejo del fuego, cultura de la paz, resolución de conflictos, entre otros temas. Con las capacidades adquiridas, integrantes de la localidad podrán seguir cuidando y defendiendo sus ecosistemas, con la finalidad de garantizar el bienestar de sus familias y de su comunidad.
Con iniciativas como ésta que buscan encontrar respuestas a través de herramientas sostenibles (SbN) se busca contribuir a resolver los desafíos que enfrenta la humanidad en la actualidad, como el cambio climático y la inseguridad hídrica. Asimismo, se abona al cumplimiento de compromisos nacionales e internacionales en materia de protección de la biodiversidad, principalmente a través de la gestión integral y territorial, la conservación y actividades de restauración, uso sostenible y fortalecimiento de la gobernanza en este contexto actual.
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