CDMX .- El pico de gallo es una guarnición a la que se le considera aderezo, ensalada o salsa típica mexicana, acompaña una gran variedad de platillos, pero lo mejor es que sus ingredientes contienen antioxidantes, proteínas y minerales que benefician la salud.
Se prepara con un picado de jitomate, cebolla, cilantro y chile jalapeño o serrano, se revuelve y listo. Adicionalmente se le puede agregar un poquito de aceite de oliva, aguacate, queso, limón y especias, como el orégano. Todo contiene elementos nutritivos, por ejemplo:
El jitomate es una buena fuente de fibra, vitamina C, potasio y vitamina A. Esto último lo indica su característico color rojo, que lo convierte en parte del grupo de la betacatorenos.
Asimismo, el licopeno que contiene este fruto posee un alto poder antioxidante, por lo que inhibe la oxidación de las células y con ello nos protege del desarrollo de enfermedades cardiovasculares y cáncer.
Su consumo ayuda al buen funcionamiento de los sistemas digestivo, cardiovascular e inmunológico.
La cebolla contiene cantidades significativas de calcio, hierro, magnesio y fósforo, que ayudan a la formación de huesos y dientes.
Además, es una buena fuente de potasio, elemento necesario para la transmisión de impulsos nerviosos e indispensable en la actividad muscular.
El sabor picante del chile se debe a una sustancia llamada capsaicina, que además de defender a la planta de los depredadores, le atribuye propiedades anticancerígenas, antinflamatorias y antioxidantes.
El chile contiene vitamina C y minerales como potasio, hierro y magnesio.
El cilantro es una hierba aromática con propiedades antinflamatorias y bactericidas. Facilita los procesos digestivos, previene el estreñimiento y los cólicos, es diurético y ayuda al cuerpo a eliminar sustancias nocivas.
Este complemento es de gran aporte nutrimental. Contiene vitaminas C y K y en menor medida vitaminas A, B1 y B2, que se mantienen en su forma natural siendo aún más benéficas para el cuerpo y la salud.
FOTO: El poder del consumidor
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