CIUDAD DE MÉXICO.- A una semana de que inició la guerra en Ucrania, el petróleo ha subido casi 20%. Así, el petróleo en el año ya lleva un alza del 45%, un inicio de año récord al ser el incremento más alto desde 1985, señala Ramsé Gutiérrez Hernández, CFA, vicepresidente de Inversiones de Franklin Templeton México.
No obstante, esta alza no es exclusiva del petróleo, casi todas las materias primas están subiendo fuertemente con un alza agregada de 24%, donde son las materias primas de energía las más afectadas con un incremento de 40%, mientras que los metales han subido 16% y las materias primas de agricultura y ganado casi 20%.
Esto ante la incertidumbre causada tanto por la guerra, como por las sanciones impuestas a Rusia, uno de los mayores exportadores de materias primas a nivel global.
No obstante, es probable que se aminore el alza conforme se recupere cierta certidumbre sobre el alcance que tendrá la guerra sobre la producción de materias primas de Rusia y Ucrania; lo cual se refleja tanto en las expectativas de los economistas como en los precios de los futuros operados en el mercado.
Esto puede tener amplias repercusiones para la inflación, ya que el aumento del petróleo podría presionar de manera relevante el precio de la gasolina en los próximos días.
Precios que ya están en sus máximos desde diciembre de 2018. En particular, el precio de la gasolina magna que ya tiene incorporado el máximo subsidio posible del IEPS, por lo que será aún más difícil solventar el alza del petróleo que se está experimentando. Aún más, la gasolina es el segundo componente más relevante del índice nacional de precios al consumidor (INPC), por lo que el impacto podría observarse a partir de la primera quincena de marzo.
Además, derivado de este impacto a la inflación, también se podría provocar una mayor desaceleración de la economía, pues los mayores precios, podrían generar un menor consumo y/o dinamismo de la economía. Esto sin contar los efectos a las cadenas de suministro que podrían verse afectadas ante posibles cortes de algunas materias primas. Tal es el caso de los láseres que usan neón de Ucrania para hacer semiconductores, con lo que el sector automotriz podría tardar más en regularizar su producción.
Lo anterior podría empeorar la tendencia que empezó a reflejarse en la encuesta de economistas de especialistas del sector privado de Banxico, donde se muestra un aumento en las expectativas de inflación para 2022 (desde 3.7% en julio 2021 hasta 4.78% el mes pasado, y una mayor desaceleración del crecimiento del PIB (desde 2.83% en julio 2021 hasta 2.04% el mes pasado).
AM.MX