Por diferentes razones, es muy común dejar de lado el lavado de tinacos y cisternas. La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) recomienda limpiar los tinacos cada seis meses, siendo la principal razón la prevención de enfermedades.
La salud y la higiene son lo más importante en lo que se refiere al consumo de agua y mantener limpio el principal contenedor de agua de la casa es primordial para tener agua pura y sin contaminantes.
El agua contaminada es causa de todo tipo de enfermedades, pero principalmente gastrointestinales y de la piel. La Organización Mundial de la Salud (OMS) atribuye a ella más de veinticinco enfermedades, siendo la principal la diarrea. Más de mil cien millones de personas en el mundo beben agua contaminada y más del 88% de los casos de diarrea se atribuyen a la misma. Sólo para tener una idea de la gravedad del problema, de acuerdo con datos de la misma OMS, un millón ochocientas mil personas mueren cada año a causa de este tipo de enfermedad. Es muy importante para prevenirlo, hacer todo lo posible para tener agua limpia y pura en casa.
Aunque es la más común, la diarrea no es la única enfermedad gastrointestinal que es consecuencia principal del consumo de agua contaminada. Existen también enfermedades causadas por bacterias como cólera, tifoidea, salmonelosis, escherichia coli, y causadas por virus como rotavirus o inclusive hepatitis A y causadas por parásitos como giardia lamblia, amebiasis, y otras más. También se deben tomar en cuenta algunas enfermedades de la piel, ya que el contacto con agua contaminada puede causar en ella irritaciones, erupciones, e infecciones.
El tinaco es el principal contenedor de agua de la casa, y es parte de todo un sistema de suministro de agua. El agua recorre un largo camino para llegar al hogar y mantener este sistema limpio es importante para no afectar la calidad del agua que sale de los grifos y la regadera para consumir agua pura. El lavado de tinaco cada seis meses ayuda a cuidar la piel y no exponerla a residuos e impurezas que provocan la obstrucción de los poros causando barros o piel rojiza, e infecciones.
Además de todas las enfermedades gastrointestinales que se pueden evitar con el lavado de tinacos, es importante notar que muchas veces se puede tener fiebre o infecciones leves causadas por el agua contaminada, que se vuelven crónicas ya que no se encuentra la causa. Manteniendo el tinaco y las tuberías limpias es una excelente manera de comenzar a encontrar la causa si se tiene este tipo de infecciones muy seguido.
El lavado de tinacos es muy rápido y sencillo si lo hace un experto. Es recomendable contratar a un profesional que tenga experiencia, como por ejemplo en plomerisimo.com. Simplemente se debe vaciar el tinaco cerrando la llave de llenado con anticipación para no desperdiciar el agua. Posteriormente se limpia con una escoba y jabón neutro para finalmente enjuagar y desinfectar. Es una tarea muy importante que no se debe olvidar. El inicio de año es una excelente oportunidad para hacerlo, ya que será más fácil recordar los seis meses para la cada limpieza.