Con motivo del Día Internacional de la Madre Tierra, la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), está llevando a cabo el Festival Nacional por el Agua y los Bosques y en la primera jornada se realizó el evento virtual: “Arte, comunicación y educación por la vida: voces de la Tierra”.
El evento contó con la participación Pablo Alarcón Cháires, biólogo con maestría en ciencias, manejo y conservación de recursos naturales; con doctorado en Pensamiento Complejo. El científico se ha dedicado a etnoecología —enfoque o abordaje interdisciplinario que explora las maneras en las cuales, la naturaleza es visualizada por los diferentes grupos humanos— y tiene un centenar de publicaciones y algunos reconocimientos en su labor como investigador.
Respecto a la convocatoria del Festival y la temática del mismo. Indicó:
Merece ser dicho, merece ser visto y merece ser sentido. Me gusta que se aborde la temática de protectores ambientales: ultimados o violentados en sus derechos. El tema del aguacate que es también algo que nos debe preocupar, pero sobre todo ocupar.
El doctor Cháires indica que algunas obras artísticas plantean la tragedia humana o socioambiental. El tema del agua y bosques es pertinente por que lo que se vive actualmente; hizo hincapié en en los incendios forestales, como el que que se está viviendo en el Cerro del Águila en Michoacán. Indicó que a través de los incendios forestales se están diezmando múltiples beneficios, concretamente el agua que es uno de los múltiples servicios ambientales que los bosques proveen. Comentó:
Tenemos que empezar a trascender esta visión la que como individuos, como seres sociales y biológicos hemos tenido durante mucho tiempo. Nos consideramos aislados del entorno natural y eso de alguna manera nos ha llevado a que nuestra interpretación, nuestra concepción de la realidad esté fraccionada.
Indicó que la naturaleza puede servir como un lienzo para desarrollar obras artísticas que sensibilicen a las personas. Esto coadyuva en el proceso de la conservación y manejo la misma. A través de actividades artísticas como fotografía o land art, es posible llegar a las personas y con ello se expresa la visión que se tiene de la naturaleza. Esto nos remonta al pasado prehispánico en el cual, los motivos son especies biológicas que convivían en armonía con los antiguos pobladores del territorio mexicano.
Durante el evento también estuvo presente la historiadora y maestra en sociología de la educación, María Leticia Galván Silva; quien se ha dedicado a trabajar en el pensamiento orientado hacia lo artístico. Comentó:
El arte y la educación tratan temas sociales. Son uno mismo.
Agregó que el se humano aprende a lo largo de su vida con lo que realiza. Por ello, el arte también es una herramienta educativa: se utilizan colores, papel u otras cosas que generan contenido artístico. Añadió que:
El medio ambiente, nuestro contexto ambiental es parte de nuestra vida diaria: donde pisamos, donde vivimos, donde estamos. Lo visual ayuda a los temas de alfabetización. nutrición, salud y temas sociales.
Galván Silva refuerza su participación con mencionar que el trabajo multidisciplinario para la conservación y educación ambiental es unir miradas, trabajar en equipo. Esto es importante para generar un mayor impacto social que genere conciencia. Cuando se trabaja con la mente y el cuerpo, se generan emociones que despiertan el interés y este, a su vez, genera que se involucren más personas y comunidades.
Por último, se contó con la presencia de Juan Maíz, artista anónimo que dice ser <<una consecuencia, un devenir de cosas, personas y encuentros. Juan Maíz es una especie de camino o proceso>>, en una entrevista que brindó para Contramuro.
Juan Maíz, contribuye en el Festival con reflexiones sobre el arte y la naturaleza. La relación inherte que todos tenemos con ella. Indica que con sus actividades, lo que busca es provocar un avance emocional y dejar de negar lo que está pasando. Expresó:
Estamos en una crisis muy fuerte: el cambio climático que nos esta pegando en este preciso momento. El compañero que nos acompaña nos cuenta la historia de otro compañero que acaba de fallecer en el incendio del Cerro del Águila. Todos nos preocupamos del rumbo que llevamos como humanidad. tenemos que parar, que frenar. El arte es una pieza fundamental de comunicación de nuestra preocupación del rumbo que llevamos.
De manera que con sus reflexiones muestra la crudeza de la realidad a la que nos entrenfamos. Juan Maíz nos habla del arte y de nuestro transitar por el mundo, del dolor y la angustia que se vive actualmente. Dice que es la clave fundamental de su obra: provocar empatía, solidaridad y ayuda mutua porque no hay salida sin estos factores.
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