CIUDAD DE MÉXICO.- Con 23 votos en favor y 20 en contra, las comisiones unidas de Energía; Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático, y de Estudios Legislativos Segunda, aprobaron sin cambios, en lo general, la minuta que reforma diversas disposiciones de la Ley de la Industria Eléctrica.
Este proyecto de decreto, enviado por la Cámara de Diputados, tiene su origen en una iniciativa preferente del Presidente de la República, y modifica los artículos 3, 4, 12, 26, 35, 53, 101, 108 y 126 de dicha Ley.
Fue aprobado por la Comisión de Energía, que preside la senadora Rocío Adriana Abreu Artiñano, con ocho votos en favor y siete en contra. En tanto, la Comisión de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático, cuyo presidente es el senador Raúl Bolaños-Cacho Cué, avaló la minuta con ocho votos en pro y siete en contra.
Los integrantes de la Comisión de Estudios Legislativos, Segunda, encabezada por la senadora Ana Lilia Rivera Rivera, respaldaron el dictamen con siete votos en favor y seis en contra.
Previamente, al inicio de la reunión, los integrantes de las comisiones desecharon, por mayoría, la propuesta de senadoras y senadores del PAN, PRI, Movimiento Ciudadano y PRD, para realizar un Parlamento Abierto, a efecto de analizar este tema.
Rocío Adriana Abreu Artiñano afirmó que esta reforma es de gran relevancia para el sector energético del país, pues será pilar de desarrollo, clave de la seguridad nacional y beneficiará a los intereses nacionales.
Aunado a ello, dijo, permitirá que se garantice el abasto nacional de energía, cumplir con el compromiso, de largo plazo, de no incrementar las tarifas, así como asegurar la confiabilidad, continuidad y calidad del sistema eléctrico nacional, además de proteger la seguridad y soberanía energética.
La legisladora destacó que esta discusión se llevó a cabo en un ambiente de pluralidad dentro de las comisiones dictaminadoras.
Indicó que se informará a la Mesa Directiva sobre la aprobación, en lo general, de este dictamen para su conocimiento e inclusión en el Orden del Día de la Sesión Ordinaria del Pleno del Senado de la República. Adelantó que las reservas se presentarán ante la asamblea para su discusión.
Al respecto, el senador Napoleón Gómez Urrutia, de Morena, acusó a la oposición de implementar una estrategia para distorsionar la información sobre este tema para privilegiar intereses particulares. Explicó que los gobiernos anteriores aplicaron una política deliberada para quebrar a la CFE, y consideró como “canallada” y traición a México, defender intereses particulares o extranjeros en contra de los de la nación y de la soberanía.
Por Acción Nacional, el senador Julen Rementería del Puerto consideró que, en la práctica, esta reforma es una “expropiación disfrazada”, además, de que es mentira que con ella la energía será más barata o beneficie a la soberanía de México. Expuso que la CFE no tiene la capacidad para generar por sí sola la energía que requiere el país, por lo que, habrá más apagones.
La senadora del PRI, Claudia Ruiz Massieu Salinas, afirmó que este proyecto de decreto viola la Constitución, todo el ordenamiento jurídico y varios compromisos internacionales adquiridos por México. “No tengo duda de que significará un retroceso a la salud de los mexicanos, la calidad del medio ambiente y en el uso eficiente de los recursos naturales”.
En el mismo sentido, la senadora Verónica Delgadillo García, de Movimiento Ciudadano, opinó que esta reforma representa pasado y significa un retroceso total que le robará el futuro a la gente. Vaticinó que la Suprema Corte de Justicia de la Nación la declarará inconstitucional.
A título personal, la senadora Nancy De la Sierra Arámburo, del PT, expresó su “franca preocupación” por el contenido de esta minuta, pues “a todas luces” viola principios constitucionales e internacionales, así como derechos humanos. Esta reforma, dijo, es parte de un patrón de decisiones del Gobierno Federal, que desde 2019, busca distorsionar el mercado eléctrico en favor de la CFE, relegando a las energías limpias a segundo plano.
En su oportunidad, el senador del PVEM, Raúl Bolaños-Cacho Cué expresó que la reforma violenta el derecho a un medio ambiente sano, ya que se despacharía la electricidad a través de combustibles que son altamente contaminantes. “El Senado debe legislar a favor del aprovechamiento de los recursos naturales para brindar energías limpias y perdurables”.
Por el PRD, el senador Miguel Ángel Mancera Espinosa aseguró que la reforma viola la Constitución en materia de prohibición de monopolios y libre competencia, ya que da ventaja a un solo competidor. También, dijo que genera obstáculos para muchas empresas que ya firmaron compromisos que tienen que ver con el medio ambiente, lo cual las dejaría totalmente fuera del mercado.
La discusión del dictamen se llevó a cabo por más de cuatro horas y participaron los integrantes de las tres comisiones dictaminadoras, donde manifestaron sus respectivas posturas, en favor y en contra, de este proyecto de decreto.
AM.MX/fm
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