CIUDAD DE MÉXICO.-Serán 8 mil voluntarios los que se sometan a la aplicación de la Vacuna ARNm contra COVID-19 del laboratorio alemán CureVac, en fase de pruebas, a quienes se les hará un seguimiento durante más de 2 años para determinar la seguridad a largo plazo de la vacuna, así como su eficacia. Se espera contar con los resultados de los primeros cortes en alrededor de seis meses.
La semana pasada llegó el embarque aéreo de la vacuna ARNm contra COVID-19 del laboratorio alemán CureVac, que incluye placebos y vacunas con el antígeno para estudio de la fase III, etapa de investigación que se realizará en coordinación con investigadores del Tecnológico de Monterrey (TecSalud), informó la Secretaría de Relaciones Exteriores, que preside Marcelo Ebrard Casaubon.
El estudio clínico se realizará en seis centros: 1) Hospital Zambrano Hellion TecSalud, 2) PanAmerican Clinical Research México SA de CV, 3) Panamerican Clinical Research Mexico – Guadalajara, 4) Unidad de medicina especializada, 5) CAIMED – México, 6) Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán.
La vacuna en estudio CureVac realiza su fase III de ensayos clínicos en 29 sitios de estudio en Argentina, Bélgica, Colombia, República Dominicana, Alemania, Países Bajos, Panamá, Perú y, ahora, en México. En estos países participarán alrededor de 36 mil 500 personas.
Ebrard Casaubon informó en un comunicado que «el propósito inicial de la estrategia del Gobierno de México fue realizar en nuestro país el mayor número posible de ensayos clínicos fase III de diversos proyectos de vacuna, por lo que CureVac forma parte de los cuatro desarrollos que ya se están implementando en territorio nacional: el de la compañía norteamericana Novavax; el de la farmacéutica china CanSino Biologics; y Janssen, de la empresa estadounidense Johnson & Johnson, y ahora del de CureVac».
Por su parte la subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la Cancillería, Martha Delgado Peralta, encargada de la gestión internacional del aprovisionamiento de vacunas, dijo que “esta fase III es muy significativa, ya que se hace posible gracias a la colaboración con TecSalud. La cooperación entre la iniciativa privada y el sector público es una pieza clave en la estrategia que el Gobierno ha establecido para garantizar el derecho a la salud de todas y todos las mexicanas y mexicanos, a través del acceso universal y gratuito a la vacuna contra la COVID-19″.
Vocero/BH