Pablo Cabañas Díaz//
La actriz mexicana María Félix deslumbró al mundo cinematográfico, ella armonizaba a la perfección su belleza, altivez y arrogancia. Diego Rivera le hizo un retrato de gran tamaño que ella despreció. Este es el origen de la obra conocida como “Retrato de María Félix”.
Fue un cuadro que nació del despecho. El pintor le hizo varias veces propuestas de matrimonio, incluso la propia Frida Kahlo le escribió a la actriz para que se casara con quien era su pareja. Los motivos detrás del rechazo de María Félix al retrato de Rivera eran bastante simples: el cuadro mostraba más piel desnuda de la que hacía sentir cómoda a la actriz, por lo que prohibió que éste se expusiera en el Palacio de Bellas Artes.
Nunca fue una obra que le diera gusto a la Diva, la pintura abandonaría la colección de María Félix y pasaría por una serie de dueños hasta su desaparición.
El doctor José Álvarez Amézquita sería el primer comprador de la obra, seguido por Juan Gabriel, el mítico cantante y compositor mexicano que también profesó su admiración por María Félix, y quien pagó 15 millones de pesos por esa obra. La pintura permanecería en posesión del cantante, sin que este hecho llamara la atención; sin embargo, tras su muerte en 2016 se develó que el retrato estaba desaparecido. Esto provocó que la familia heredera comenzara la búsqueda de la obra que podría valer cientos de miles de pesos.
El traspaso de propiedad de Juan Gabriel al político César Duarte levanta distintas polémicas, en particular cuando el receptor del regalo es un funcionario público que ahora conocemos por su malversación de fondos. Sin embargo, en el testamento de Juan Gabriel figura la obra. Como en el caso de las obras de arte robadas, será cuestión de suerte, tiempo y mucha espera, saber cómo se resuelve esta desaparición, si es que el cuadro efectivamente ha salido del país o peor aún, pudo haber sido destruido versión que hizo presente desde la muerte del cantante-compositor
Una de las versiones que más peso tienen es que Juan Gabriel la prestó al exgobernador de Chihuahua César Duarte Jáquez, pero no existe ninguna prueba de este movimiento. Su hijo, Iván Gabriel Aguilera Salas, anunció que interpondrá una denuncia para que el exgobernador dé cuenta sobre la obra pintada en 1949. Al ser considerados monumentos artísticos por el Instituto Nacional de Bellas Artes, toda compra- venta, donación o regalo de obras de esta naturaleza debe declararse forzosamente ante esa institución.
El Divo de Juárez tuvo una relación difícil con la Doña el 18 de marzo de 1979, cuando acudió al programa “Siempre en Domingo”, donde la esperaban el conductor Raúl Velasco para que escuchara la composición que le había hecho a una mujer difícil y explosiva en sus expresiones, en ese día, el cantante se mostró nervioso y muy temeroso pues era la primera vez que la famosa escucharía el tema.
María Félix era imprevisible.
La Félix siempre fue una mujer imponente y lo demostró en sus entrevistas e incluso en sus películas donde se veía a sus personajes de carácter fuerte por lo que nadie se atrevía a enfrentarla. Ese día habló: “Yo creo que con el regalo que me ha hecho Juan Gabriel, es como el regalo, que me hizo Agustín Lara, el maestro Lara, yo digo que es el mejor regalo de mi vida; he tenido dos regalos extraordinarios y la canción de “María Bonita” y tu canción, por eso estoy aquí”, Juan Gabriel respiró de nueva cuenta su cara de miedo quedaba atrás.