CIUDAD DE MÉXICO, — El PRI en el Senado presentó una iniciativa que permita la siembra, cultivo o cosecha de la amapola, y no se castigue esa actividad siempre y cuando se haga con fines médicos y científicos.
Al presentar la iniciativa que reforma diversos artículos de la Ley General de Salud y del Código Penal Federal, el senador por Guerrero, Manuel Añorve Baños, expuso que la política prohibicionista ha provocado un mercado negro en la producción y distribución de diversas drogas.
Recordó que la siembra de amapola en el país se concentra en Sinaloa, Chihuahua, Durango, Guerrero, Nayarit, Jalisco, Michoacán y Oaxaca. Y destacó que en el estado que representa, unas 120 mil personas  —la mayoría campesinos— siembran amapola en comunidades pobres y aisladas.
Según la ONU, en México hay más de 28 mil hectáreas de tierra cultivable dedicadas a la amapola, lo que representa la tercera área geográfica más grande dedicada al cultivo de opio, después de Afganistán.
El legislador sostuvo que los medicamentos derivados de los  opioides, enfocados especialmente a tratamientos paliativos para pacientes terminales, están fuertemente restringidos y con desabasto “alarmante”.
Resaltó que por lo lucrativo que resulta este negocio, se ha desatado una guerra para controlar los campos de siembra de amapola, volviendo inaccesible valles montañosos donde se extiende la pobreza, convirtiendo a los campesinos de la zona prácticamente en esclavos.
Añorve afirmó que con su iniciativa se abre una oportunidad de darle vuelta a esta situación y convertir una situación penosa para muchos campesinos en una oportunidad de desarrollo económico para esas comunidades.
“Podemos establecer una vía legal para la goma de opio que se extrae de la amapola ofreciendo a los agricultores seguridad para ellos y sus familias, así como ingresos estables y 100 por ciento lícitos”, dijo.
La iniciativa fue turnada las comisiones de Salud y Estudios Legislativos para su análisis.