Dice que ella tiene formación y experiencia porque gobernó la ciudad más grande del país, por lo que creará «un cuarto nivel de gobierno»
CIUDAD DE MÉXICO, 3 de septiembre 2018.- Rosario Robles Berlanga considerada como una de las mujeres más polémicas y controvertidas de la política mexicana, dijo que es una mujer de izquierda, comprometida con una visión progresista, defensora del estado laico, convencida de la trascendencia de la participación social y la justicia para las mujeres.
En entrevista con Sara Lovera, directora de SemMéxico, anunció que como ciudadana libre seguirá en la política, en los espacios disponibles, sin partido, o en un espacio “que yo misma crearé”. Previno: “hay muchas trincheras, trabajaré por las causas que tienen que ver con mi país ocupándome de las causas fundamentales, las de izquierda progresista”.
La ex primera jefa de gobierno en la Ciudad de México y actual secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU), contestó a todas las preguntas. “Sigo viviendo en la calle De Las Flores de Coyoacán, que me esculquen”; le puso agenda urbana al próximo gobierno y sobre ella, dijo vivir la oportunidad única de haber puesto los cimientos de los derechos ciudadanos a vivir en ciudades seguras, los espacios públicos, la creación de vivienda digna, ello a pesar de la conflictividad que ello entrañó.
Aseguró que se resolvieron 153 mil expedientes de demandas agrarias. El saldo es blanco. Y adelantó que el próximo gobierno deberá pensar en crear un cuarto nivel de poder, el de la gobernanza metropolitana que exige una reforma constitucional.
Enmarcada a su izquierda por una inmensa imagen de Emiliano Zapata, hablamos sobre una mesa de cristal, todo el tiempo captadas por una cámara de video. Y advirtió: el próximo gobierno tendrá que hacerse cargo de 2 millones de familias, 10 millones de mexicanos y mexicanas que siguen viviendo en hacinamiento, donde la violencia conspira contra las niñas. Una de las mediciones de la pobreza, es el hacinamiento. No olvidarlo.
¿Dice el presidente electo que desaparecerá el programa de los famosos cuartos rosas?
Lanzó una carcajada, para señalar que en la actual administración se construyeron 300 mil cuartos adicionales en las unidades habitacionales del ISSSTE y el INFONAVIT que construyeron casas con una sola recámara, especialmente en los dos sexenios anteriores, y se realizaron casi 7 millones de acciones de vivienda. Se reordenó el territorio urbano de al menos 59 ciudades, donde participó “el pueblo”, porque en México lo que priva es la autoconstrucción. Sólo para rehacer pueblos y comunidades afectadas por el sismo de septiembre de 2017, participan voluntariamente un ejército de 50 mil mujeres vigilantes de que lo prometido se haga. Aseguró que todas las viviendas construidas en este sexenio fueron de 2 recámaras al menos.
Para dejar en claro, lo que se hizo, afirmó que el Infonavit construyó o dio crédito en 46 años, para 10 millones de viviendas, la tercera parte se construyó en esta administración, esto es más de 3 millones en 6 años, antes se hacían 100 mil cada año, hoy 500 o 600 mil. En el Fovissste con miles de viviendas, en esta administración se hizo la cuarta parte.
Explicó qué son las casi 7 millones de acciones de vivienda: vivienda nueva, usada, mejoramiento de la vivienda, pintura, remodelaciones y viviendas mejoradas.
El próximo gobierno va a tener que dar importancia y valor a las iniciativas del presidente Enrique Peña Nieto, porque sin dádivas ni clientelismo, creó la ley, una política urbana que puso en el centro de la nación, una que fue abandonada desde los años 40; puso a trabajar a todas las dependencias involucradas, porque no se pueden reordenar las ciudades sin el concurso de quienes construyen caminos, puentes, calles, equipamiento urbano y ciclovías.
Los desarrolladores tuvieron que plegarse a la nueva política para reordenar los territorios, “si no respetan los perímetros urbanos, no hay subsidio”. Hoy la construcción de vivienda genera el 6 por ciento del producto interno bruto y mantiene 3 millones de empleos directos e indirectos. Que les pregunten antes de cambiar las cosas.
Afirmó que hay que seguir y cumplir la ley, pero además no es posible que los gobiernos locales, los municipios, decidan sobre el uso del suelo. Las ciudades crecieron de manera desordenada, extendida horizontalmente y desiguales. Eso generó un crecimiento desquiciado en todo el territorio nacional. Hay muchos conflictos, una conflictividad enorme; cuestionó esta facultad del el municipio que es la del uso del suelo. El suelo ha pasado a ser especulativo, se encareció y ha perdido su función social. Además se construye en la desigualdad, ahí está Santa Fe y al lado cartolandia. Entonces no puedes tener vivienda social intra urbana, porque es carísimo y quienes deciden son los municipios.
SE RECUPERÓ LA RECTORÍA DEL ESTADO
Explicó que en esta administración se recuperó la rectoría del Estado en materia de vivienda, desarrollo urbano y ordenamiento territorial; se creó la Ley General de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano, se han creado sus similares en 20 entidades. “Por eso, en suma, me siento satisfecha”.
Luego, presumió, en esta administración se recuperó la rectoría del Estado en el ordenamiento urbano. Algo que no puede deshacerse. Hay que considerar que el 51 por ciento del territorio nacional, la mitad de este país son ejidos y comunidades, o terrenos nacionales. Para eso se ordenó el registro agrario semejante al registro público de la propiedad. Sobre esas tierras rurales crecieron las ciudades, se construyeron aeropuertos, presas, gaseoductos.
Consideró que el próximo gobierno tendrá que dar continuidad a las bases que por ley dan derecho a la ciudad, a los espacios públicos, a la gobernanza metropolitana, una política que reconoció de entrada que hoy 8 de cada 10 mexicanos y mexicanas viven en zonas urbanas. En el campo sólo vive el 20 por ciento de la población.
Se deberá crear un esquema más institucional para que quienes aparentemente no pueden adquirir una vivienda porque no son trabajadores formales, ellos y ellas sin crédito de la banca comercial, meseros, policías municipales, taxistas, vendedoras ambulantes, quienes trabajan en sus casas, mujeres, maquilas familiares y empleados estatales, que no tienen seguridad social pero sí un ingreso seguro, ingreso garantizado, deben ser sujetas de crédito. Esto es un mercado enorme, que puede generar ahorro, obtener crédito y subsidio gubernamental, así pueden acceder a una vivienda, apoyados/as con la banca de desarrollo como garante, y acompañando con subsidio del gobierno. Entonces se puede ampliar el derecho a una vivienda social. Ahora se está haciendo un programa piloto, como una semillita. Toca a la próxima administración desarrollarlo.
Entrevistada en su despacho, el de la Comisión Nacional de Vivienda (CONAVI), en la colonia Polanco, aseguró que la pobreza más grande -60 por ciento- está en las ciudades, frenar esta acción en el próximo gobierno sería equivocado no obstante que en casi 6 años hubo que armar alianzas y estrategias en concierto con los acuerdos internacionales; además México incluyó, como un hito, la visión de transversalidad, la visión de género en estas políticas porque, “las mujeres vivimos distinto a los hombres”.
Para argumentar su visión de izquierda, explicó que el tema del derecho a la ciudad, la vivienda, lo hizo con un enfoque de derechos y libertades, enfoque que tiene que ver con una visión progresista y de izquierda. Finalmente, dijo, se trabaja por la gente, por los que menos tienen, en las ciudades, recalcó, donde se concentra ahora la pobreza, el 60 por ciento de los habitante de este país está en las ciudades, ya no es nada más una pobreza rural, una pobreza indígena. Siempre que hablamos de pobreza nos viene a la cabeza la imagen de la mujer indígena en una zona alejada, es cierto, pero están en las ciudades, todas las zonas periurbanas, son extremadamente pobres. Trabajar ahí para mejorar la vivienda, el entorno urbano, para mejorar la seguridad, ha sido trascendente.
GOBERNANZA METROPOLITANA
Destacando que ella tiene experiencia, formación, porque gobernó la ciudad más grande del país, explicó que está en proceso la creación de un cuarto nivel de gobierno. El de la gobernanza metropolitana.
La gobernanza metropolitana es pensar en un cuarto nivel de gobierno, el gobierno metropolitano. Esta propuesta, dijo, hace temblar a quienes “me escuchan”. Es claro que no se puede gobernar a las zonas conurbadas que hoy trabajan con mecanismos de coordinación metropolitana pero no son vinculatorios. Tienes de municipio a otro diversas normatividades. Imposible que en un lugar haya el programa no circula (por decir algo) y en otro no. Bandos distintos de seguridad. Vivienda, uso de residuos sólidos, del agua. El tema es tener una misma visión de desarrollo urbano. Propone una gobernanza, de nivel gerencial y de administración de la metrópoli, con un marco jurídico. Hoy sólo existe una propuesta incipiente en la ley general. Se necesita una reforma constitucional para darle a la gobernanza metropolitana toda la fuerza.
Lo del nuevo aeropuerto es un ejemplo. Hay que discutir a quien corresponde, la decisión de qué hacer con los terrenos del Aeropuerto Benito Juárez. Por eso se necesita una visión metropolitana, una visión integral. Esto toca en la próxima administración.
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