*“Las fuerzas que empujaban hacia el odio eran, por su misma naturaleza vil, más vehementes y agresivas que las conciliadoras; además, se escondían tras ellas intereses económicos con menos escrúpulos que los nuestros… Era la pandilla de siempre, eterna a lo largo de los tiempos, que llamaba cobardes a los prudentes, débiles a los humanitarios,... Más [+]...