Sergio Gómez Montero* De hecho, afirmar hoy que la democracia electoral es sólo un cúmulo de trampas, triquiñuelas, asesinatos y negocios turbios es un lugar común. Como también es otro lugar común, de risa loca, afirmar la existencia de un árbitro –el INE se denomina en el país– que organiza al troche y moche los... Más [+]...